Donde:
Q1: Volumen de ventas inicial (cantidad) - 80 unidades
Q2: Volumen de ventas después del cambio de precio (cantidad) - 100 unidades
P1: Precio inicial - $6
P2: Nuevo precio - $4
Ahora podemos calcular la elasticidad precio de la demanda:
22.2 / -40 = -0.55
Obtenemos un número negativo entre 0 y -1. Eso significa que no tienes suficiente elasticidad precio para disminuir o aumentar los precios. Si el precio cambia en un 1%, la demanda se alterará solo en un 0.55%, y un cambio del 10% en el precio desplazará la demanda en un 5.5%.
Ten en cuenta que en la mayoría de los casos, la elasticidad precio es negativa (está por debajo de cero). Sin embargo, por conveniencia, solo se utilizan números positivos para denotar la elasticidad. Mientras la elasticidad se mantenga por debajo de 1 (o por encima de -1), se considera que el producto es inelástico.
Una elasticidad precio positiva (mayor que 1) significa que un producto es elástico, es decir, un precio más alto resultará en un crecimiento en la demanda. Esta es una situación rara que generalmente ocurre en mercados particulares, como los bienes de lujo.
Antes de pasar al ejemplo, es importante entender el cálculo de cada porcentaje en la fórmula de EPD. El porcentaje de cambio en la demanda se obtiene restando la cantidad inicial de unidades vendidas a la nueva cantidad, y luego dividiendo ese valor entre la cantidad inicial. Lo mismo se aplica al cambio de precio: se resta el nuevo precio al anterior y se divide entre el precio inicial. Multiplicamos ambos valores por 100 si queremos verlos como porcentajes completos.
Por ejemplo:
% cambio en la cantidad = (Q2 - Q1) / Q1 = (100 - 80) / 80 = 0.25 o 25%
% cambio en el precio = (P2 - P1) / P1 = (4 - 6) / 6 = -0.33 o -33%
Estos cálculos permiten interpretar el resultado de la fórmula con más claridad. Un EPD menor a 1 (inelástica) indica que una variación en el precio no cambia mucho la cantidad demandada. En cambio, un EPD mayor a 1 muestra que el consumidor es muy sensible a los cambios de precio, lo que puede influir directamente en los ingresos de una empresa si no se ajusta correctamente el valor de su producto o servicio.
Este tipo de análisis es útil para tomar decisiones estratégicas de marketing, ya que permite planificar promociones, prever los efectos de una subida o bajada de precio, y entender mejor cómo reaccionará el mercado ante distintas variaciones en el precio de un determinado bien.